miércoles, 4 de julio de 2018

ANALISIS Y RESEÑA: The Hellbound Heart de Clive Barker

"Sin lágrimas, por favor. Es un desperdicio de un buen sufrimiento."

Una obra grotesca y aterradora que te hará llegar a tus limites mas tabús del mundo de la lectura, y podría ser un excelente ejemplo de siempre leer la letra chiquita de los contratos. 


Frank Cotton busca mas en la vida, creyendo que la búsqueda del placer absoluto es la meta mas importante en la vida de todo ser humano. Es un hombre acostumbrado a vivir al limite y en su búsqueda interminable, se encuentra con la caja de Lemarchand, o mejor conocida como la configuración del Lamento, un rompecabezas que al ser resuelto le prometo transportarlo a otra dimensión donde un mundo de placer inimaginable se le sera revelado. Esperando mujeres desnudas dedicadas a traerle todo el placer del mundo, Frank se da a la tarea de resolverlo, pero pronto se da cuenta que los seres conocidos como los Cenobitas, los encargados de darle su recompensa, tienen una idea muy diferente de lo que es placer. Por otro lado tenemos al hermano de Frank, Rory y su desdichada esposa Julia, quienes están en proceso de mudarse en la misma casa donde Frank había resuelto el rompecabezas esa fatídica noche. Julia, quien había tenido un amorío con el apenas unas horas antes de casarse con su hermano, no puede evitar recordarlo desde que desapareció sin una palabra. Es esta misma obsesión la que la lleva a sentirse atraído a un cuarto oscuro y húmedo de la casa sin explicación, donde descubrirá que tan lejos puedes llegar por tu deseo mas oscuro.


Yo no consideraría este un libro muy aterrador. No me hizo sentir escalofríos durante la noche y sentirme observada, pero su contenido es extremadamente grotesco lo que lo convierte en una lectura muy incomoda e intrigante. La imagen de Pinhead esta para siempre grabada en nuestra memoria debido a la película donde esta novela fue adaptada (escrita y dirigida por el mismo autor por cierto, por lo cual es probablemente una de las adaptaciones mas exactas que existen) pero el no es el centro de la historia. Los Cenobitas se encuentran muy poco durante la novela, pero cada vez que aparecen sus escenas son inolvidables debido a su increíble capacidad de tortura con una mirada fría. No muestran ni placer ni interés, porque en si ellos piensan que están haciendo lo que los que resuelven el rompecabezas piden. Ellos buscan placer pero lamentablemente la idea de placer para los Cenobitas se asemeja mas a una versión muy extrema del sadomasoquismo. Parecen estar tan acostumbrados de estos actos tan sangrientos que es como una noche cualquiera para ellos.  Los Cenobitas sirven como un ingrediente, trayendo el lado ocultista a la novela con su presencia, pero al final de cuentas la historia trata sobre el deseo humano ya que todo lo malo en el libro es provocado por los humanos y por sus intentos de obtener aquellos deseos mas egoístas. Nos muestra como el deseo humano puede volverse tan destructivo que puede arrasar con todo inocente en su camino por obtenerlo. Y lo vemos en todos los personajes introducidos.


Empecemos con Frank quien es una persona egoísta desde el inicio, a quien no le importa dañar a alguien tan cercano como su hermano, siempre y cuando signifique obtener placer para el mismo. Esta forma de pensar lo lleva a la leyenda de la caja de Lemarchand pero lo único que consigue es tortura, en una prisión sin fin donde constantemente conocerá horrores y jamas morirá. Una clase de infierno, podríamos llamarlo, por sus pecados si gustan verlo de una manera religiosa. Tenemos también a Julia, esposa de Rory, que guarda una interminable lujuria por Frank después de una noche que pasan juntos, horas antes de su boda. Esta escena usa un pequeño simbolismo con la presencia del vestido de novia en la cama mientras Frank y Julia tenían sexo. Los vestidos de novia, por costumbre y leyenda, son la imagen de la pureza con la que la novia entra al matrimonio. Es por eso que son blancos. Fue tanta la lujuria de Julia que no le importo tener sexo con un hombre que no es su futuro esposo y unas horas después casarse usando ese mismo vestido, que ahora simbolicamente esta "contaminado" y por consecuencia contamina su matrimonio entero. Por otro lado tenemos a Rory, a quien podríamos considerar al mas inocente de los protagonistas. Su deseo por Julia lo consume a tal punto que simplemente vive ignorando lo que su esposa en realidad siente por el. En este caso, el deseo lo destruye solamente a el, viviendo una mentira que el conoce pero se niega a aceptar. En varias ocasiones el libro parece dar a entender que la única razón por la que Rory ama tanto a Julia es por su belleza, lo cual es algo muy superficial para basar un matrimonio duradero. Podríamos llamarlo mas lujuria que amor y obviamente eso nos regresa al mismo tema que los demás. Todos son controlados por sus deseos carnales. Otro ejemplo de este deseo también viene con Kirsty, quien desde el principio se nos muestra que esta perdidamente enamorada de Rory a pesar de que esta casado. Kirsty no hace nada por mostrar sus sentimientos, pero es bastante claro lo que esta pasando para todos los demás excepto Rory, y es presentada de cierta manera como una rompe hogares a pesar de que no ha hecho nada. Pero su obsesión por el es demasiado clara. Como ultimo ejemplo de esto tenemos a las victimas sacrificadas durante la novela. Hombres encontrados en un bar que no buscan mas que saciar un deseo carnal sin sentimientos. Algo común en la actualidad pero de nuevo estamos manejando con un simbolismo de como el placer puede llegar a destruirnos cuando permitimos que nos consuma. Una de estas victimas de hecho es un hombre casado que inclusive se atrevió a mostrarle fotos de su esposa e hijos a la persona con la que planeaba acostarse. Son presentados como personas que no les importa, solamente les importa saciar un deseo propio sin importar a quien lastimen en el proceso.


Ninguno es inocente, algunos probablemente no son tan malos como por ejemplo Frank, pero todos cumplen con la imagen de un pecador cuyo egoísmo y deseo los llevo a su perdición. Curiosamente yo lo veo como un mensaje bastante religioso para un libro que no parece serlo. Tenemos nuestros pecadores y tenemos a los Cenobitas, quienes son los demonios encargados de castigar a estas personas. Es un mensaje bastante claro desde el principio. Y con un mensaje así pasamos al lado grotesco de la historia que Clive Barker fue un experto en hacerte vivir. La novela es bastante corta así que puede ser una lectura fácil de terminar en cuestión de días o un solo día para los lectores mas experimentados, pero a pesar de su tamaño contiene tremendo peso. Sobre todo la descripción de la violencia manejada aquí. Ya he usado en muchas ocasiones la palabra grotesca pero sinceramente no encuentro otra mejor. Con el uso de la violencia y el sexo en su forma mas cruda, Barker te presenta lo que esta escribiendo sin necesidad de recurrir a párrafos y párrafos de texto para quemarte la imagen en la cabeza. En algunas ocasiones se necesita una lectura que vaya directamente al grano para describirte lo que estas leyendo, y aquí funciono maravillosamente. Las pocas veces que el reino de los Cenobitas hizo su aparición podías imaginarte en este mundo de tormento al punto que escuchabas las campanas que eran descritas en tu mente. Este estilo de narración fue perfecto sobre todo durante nuestro conflicto final, convirtiéndolo en uno de los finales con mas acción que he visto en un libro. Simplemente, nadie mas que Clive Barker podría describir una versión del infierno aun mas oscura y retorcida que la versión que creemos conocer.

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